Este artículo analiza los sentidos de la filiación en Hijos y Nietos de Presos Políticos: una agrupación argentina conformada por descendientes de perpetradores que defienden a sus familiares juzgados por crímenes de lesa humanidad. Si bien desde los años de la transición democrática los vínculos familiares se convirtieron en un vector de legitimidad para intervenir en el espacio público, para los hijos e hijas de perpetradores el parentesco no es un elemento que garantice per se adhesión a sus reclamos. Antes que ser un privilegio, tener un lazo de sangre con personas detenidas por delitos de lesa humanidad puede ser motivo de rechazo o de impugnación social. Sobre la base de esta consideración, se atienden los discursos, los sentidos y valores a través de los cuales estos activistas buscaron hacer de su condición de “hijos/as” un capital para intervenir en el espacio público.
Este artículo analiza los sentidos de la filiación en Hijos y Nietos de Presos Políticos: una agrupación argentina conformada por descendientes de perpetradores que defienden a sus familiares juzgados por crímenes de lesa humanidad. Si bien desde los años de la transición democrática los vínculos familiares se convirtieron en un vector de legitimidad para intervenir en el espacio público, para los hijos e hijas de perpetradores el parentesco no es un elemento que garantice per se adhesión a sus reclamos. Antes que ser un privilegio, tener un lazo de sangre con personas detenidas por delitos de lesa humanidad puede ser motivo de rechazo o de impugnación social. Sobre la base de esta consideración, se atienden los discursos, los sentidos y valores a través de los cuales estos activistas buscaron hacer de su condición de “hijos/as” un capital para intervenir en el espacio público.