El periodo de Gobierno nacional de la Alianza Cambiemos (2015-2019) significó la apertura de un nuevo escenario en Argentina en el que las políticas de derechos humanos y la hegemonía de las memorias, que condenan el terrorismo de Estado de la década del setenta y la última dictadura, fueron impugnadas. Este artículo se pregunta por las acciones que el movimiento por los derechos humanos desarrolló, como parte de su estrategia de confrontación con el Estado. Para ello —desde una metodología de corte cualitativo y la aproximación analítica del estudio de un corpus de casos, de escala nacional y regional— se indaga las intervenciones que diversos activistas de este agente colectivo llevaron a cabo en el espacio público. La investigación evidencia que, ante el renovado desafío, las acciones del movimiento se fortalecieron y se cargaron de nuevos sentidos que obedecían a los intentos por defender, disputar y preservar un pasado reconocido como legado y que se sostiene, aún, en el deber moral de su memoria, considerándolo como un acuerdo irrenunciable. Así, se espera contribuir al estudio de los comportamientos de los actores sociales que, abanderados colectivamente de la lucha contra el avance de las nuevas derechas, batallan los usos e interpretaciones del pasado reciente, que estas despliegan con gran protagonismo en su agenda política.
El periodo de Gobierno nacional de la Alianza Cambiemos (2015-2019) significó la apertura de un nuevo escenario en Argentina en el que las políticas de derechos humanos y la hegemonía de las memorias, que condenan el terrorismo de Estado de la década del setenta y la última dictadura, fueron impugnadas. Este artículo se pregunta por las acciones que el movimiento por los derechos humanos desarrolló, como parte de su estrategia de confrontación con el Estado. Para ello —desde una metodología de corte cualitativo y la aproximación analítica del estudio de un corpus de casos, de escala nacional y regional— se indaga las intervenciones que diversos activistas de este agente colectivo llevaron a cabo en el espacio público. La investigación evidencia que, ante el renovado desafío, las acciones del movimiento se fortalecieron y se cargaron de nuevos sentidos que obedecían a los intentos por defender, disputar y preservar un pasado reconocido como legado y que se sostiene, aún, en el deber moral de su memoria, considerándolo como un acuerdo irrenunciable. Así, se espera contribuir al estudio de los comportamientos de los actores sociales que, abanderados colectivamente de la lucha contra el avance de las nuevas derechas, batallan los usos e interpretaciones del pasado reciente, que estas despliegan con gran protagonismo en su agenda política. Read More