El ensayo pretende investigar un tema hasta ahora descuidado por los historiadores, a saber, el extenso y problemático personal que sirvió a la Inquisición romana en Italia y a los tribunales de fe activos en otros lugares durante tres siglos. La metodología empleada ha sido doble, inspirándose tanto en los estudios religioso-institucionales como en los de historia social. La amplia indagación documental realizada en los archivos vaticanos e italianos ha permitido reconstruir los principales rasgos de la familia inquisitorial italiana, observar su evolución en el tiempo, su distinta geografía y la variación de las relaciones que a través de ella estableció la Iglesia pontificia con las élites culturales y políticas de Italia durante el antiguo régimen. Ello ha permitido llegar a importantes consideraciones históricas, que insisten en un fenómeno hasta ahora investigado en otros frentes, como las relaciones entre la Iglesia de la Contrarreforma y los fieles entre los siglos XVI y XVIII. El sistema de patentes permitió al ala más intransigente de la Iglesia entablar una relación de protección y connivencia con miles de notables violentos, que a cambio garantizaron apoyo intelectual, material y político a las jerarquías eclesiásticas de la península hasta el Risorgimento italiano.
El ensayo pretende investigar un tema hasta ahora descuidado por los historiadores, a saber, el extenso y problemático personal que sirvió a la Inquisición romana en Italia y a los tribunales de fe activos en otros lugares durante tres siglos. La metodología empleada ha sido doble, inspirándose tanto en los estudios religioso-institucionales como en los de historia social. La amplia indagación documental realizada en los archivos vaticanos e italianos ha permitido reconstruir los principales rasgos de la familia inquisitorial italiana, observar su evolución en el tiempo, su distinta geografía y la variación de las relaciones que a través de ella estableció la Iglesia pontificia con las élites culturales y políticas de Italia durante el antiguo régimen. Ello ha permitido llegar a importantes consideraciones históricas, que insisten en un fenómeno hasta ahora investigado en otros frentes, como las relaciones entre la Iglesia de la Contrarreforma y los fieles entre los siglos XVI y XVIII. El sistema de patentes permitió al ala más intransigente de la Iglesia entablar una relación de protección y connivencia con miles de notables violentos, que a cambio garantizaron apoyo intelectual, material y político a las jerarquías eclesiásticas de la península hasta el Risorgimento italiano. Read More